La loma del tanque

La loma del tanque era el sitio donde hacia mis travesuras con los chamas de mi Lawton. Ahora voy a hacer mis travesuras en este sitio.

lunes, 14 de julio de 2014

Vida después de la muerte.


Casi cincuenta personas fallecieron al hundirse un remolcador frente a las costas de Cuba hace 20 años. Una decena de niños pereció en el percance. Bah, que fácil se dice, una decena, casi cincuenta personas, que sencillo de resumir. Aun diciéndolo con números, 10 niños, 37 personas muertas me resulta injustamente fácil escribir. Y es que hay que pensar en uno solo, por ejemplo, en la niña de 5 meses, en la de 2 años, en  los dos de tres años ¿y el de 4? ¿y la de 5? ¿Y los de 10, 11 y 12 años? 17 años, 50, 38, 45, son otras edades de los muertos aquel día y no puedo dejar de escribirlas, y es que no pienso en todos sino en cada uno de ellos. Esos últimos momentos, saber que tu hijo se está hundiendo, se está ahogando, pensar que por que papi no me saca mientras el agua le entra a los pulmones, y ese dolor, y ese pánico, hasta que, finalmente, la calma, la muerte.

No queda más remedio que creer en que más allá del último suspiro hay vida, luz, y hasta felicidad infinita, y sobre todo cuando se muere así, como murieron esas 37 personas que lo que querían era vivir, por eso se montaron en aquel remolcador, para vivir. No queda más remedio que conversar con ellos, aunque no estén, mirar arriba y decirles que no los olvidamos, que no los podemos olvidar, que lo sentimos mucho, y que tenemos la fe en que ahora 20 años después están bien y mejor que nunca.

No queda más opción que la de creer que existe el infierno, cruel, inhumano lleno de gritos de desespero, a donde irán aquellos autores de este crimen, y que en vida siguieron impunes hasta su muerte. Quizás no se ahoguen en la oscuridad en medio del oleaje creado por otros barcos para aumentar su agonía, quizás mueran en una cama tranquilos y rodeados de los suyos, pero que se preparen porque hay vida después de la muerte, y la de ellos será de dolor, de más dolor que aquellos que mataron aquel Julio de 1994.

Gloria a ustedes, 37 almas que se fueron, pero ahí están hoy, en la memoria de Cuba, y no serán olvidadas.

Lista de personas asesinadas por el régimen castrista en el remolcador 13 de marzo:
Niños asesinados:
1-      Hellen Martínez Enríquez . . . . . . . . . . . 5 meses
2-      Xicdy Rodríguez Fernández . . .. . . . . . . 2 años
3-      Angel René Abreu Ruiz . . . . . . . . . . . . 3 años
4-      José Carlos Nicle Anaya . . . . . . . . . . . . 3 años
5-      Giselle Borges Alvarez . . . . . . . . . . . . . 4 años
6-      Caridad Leyva Tacoronte . . . . . . . . . . . 5 años
7-      Juan Mario Gutiérrez García. . . . . . . . .10 años
8-      Yasser Perodín Almanza . . . . . . . . . . . 11 años
9-      Yousell Eugenio Pérez Tacoronte . . . . . 11 años
10-   Eliecer Suárez Plasencia . . . . .            12 años
Jóvenes asesinados:
11-   Mayulis Méndez Tacoronte . . . . . . . . .17 años
12-   Miladys Sanabria Cabrera . . . . . . . . . .19 años
13-   Joel García Suárez . . . . . . . . . . . . . . 20 años
14-   Odalys Muñoz . . . . . . . . . . . . . . . . . .21 años
15-   Yaltamira Anaya Carrrasco . . . . . . . . . 22 años
16-   Yuliana Enríquez Carrazana . . . . . . . . .22 años
17-   Lissett María Alvarez Guerra . . . . . . . . 24 años
18-   Jorge Gregorio Balmaseda Castillo . . . . 24 años
19-   Ernesto Alfonso Loureiro. . . . . . . . . . . 25 años
20-   María Miralis Fernández Rodríguez . . . . 27 años
21-   Jorge Arquímedes Levrígido Flores . . . . 28 años
22-   Leonardo Notario Góngora . . . . . . . . . .28 años
23-   Pilar Almanza Romero . . . . . . . . . . . . .31 años
24-   Rigoberto Feu González . . . . . . . . . . . .31 años
25-   Omar Rodríguez Suárez. . . . . . . . . . . . .33 años
26-   Lázaro Enrique Borges Briel . . . . . . . . . 34 años
27-   Martha Caridad Tacoronte Vega . . . . . . .35 años
28-   Julia Caridad Ruiz Blanco . . . . . . . . . . . 35 años
Adultos asesinados:
29-   Eduardo Suárez Esquivel . . . . . . . . . . . . 38 años
30-   Martha M. Carrasco Sanabria . . . . . . . .   45 años
31-   Augusto Guillermo Guerra Martínez . . .    45 años
32-   Rosa María Alcalde Puig . . . . . .. . . . . . . 47 años
33-   Estrella Suárez Esquivel . . . . . . . . . . .   48 años
34-   Reynaldo Joaquín Marrero Alamo . . . .      48 años
35-   Amado González Raíces . . . . . . . . . . . . 50 años
36-   Fidencio Ramel Prieto Hernández . . . .     51 años
37-   Manuel Cayol ...................................  50 años

miércoles, 9 de julio de 2014

El mundial.


El Castrismo lleva imperando en Cuba, haciendo lo que le da la gana, 55 años, 7 meses y nueve días. Mucho podrá hablarse de las criminales herramientas de las que se ha valido para mantenerse en control durante este tortuoso periodo, de su eficacia, su eficiencia, su inteligencia para mantener bajo la bota a 11 millones de personas que, antes de esta mutación, habían acabado con varias dictaduras y habían forjado un país próspero, moderno, y mucho, por mucho, más libre que hoy. Es innegable que bajo un sistema totalitarista absoluto, además de corte colectivista, la sociedad civil perece, los valores verdaderos terminan por ceder, como mecanismo de supervivencia de las víctimas, ante los falsos e impuestos. En el totalitarismo se pierde el “Yo” y la perspectiva de cada cual dentro de una sociedad. Cuesta arriba ha sido el camino de aquellos que, encontrando esa chispa tan ausente, se resisten a perder su individualidad, primero, luego su ciudadanía para así poder enfrentar a cara descubierta al enorme aparato aplastante que es ese sistema, sin acceso a medios, sin capacidad de reclutamiento, coordinación, en fin, duro, muy duro.

No dudo, porque para llegar a enfrentarse al régimen hacen falta cuotas altas de muchas cosas, de la honestidad, el compromiso, los buenos deseos de todos aquellos que a su forma, según sus experiencias y su época, van saltando a la palestra de la rebeldía publica en Cuba. Los debe haber malos, oportunistas, hasta traidores, pero dudo mucho que sean lasca apreciable en número dentro de las filas de los disidentes cubanos. Sin embargo, con tan buen equipo, siguen corriendo los años y el totalitarismo sigue tiranizando casi por la libre aun. Hay dos formas de verlo, Alemania le gano a Brasil 7-1 porque Alemania jugo mejor, o porque Brasil jugo peor. Los jugadores brasileños son brillantes, el contrincante también lo es, pero Brasil planteo mal el juego, difícil la tenía, aun planteándolo bien, no se enfrentaba a cualquier selección del montón, pero una derrota tan aplastante no da espacios para hablar de lo bueno del contrincante, sino de lo mal que plantearon los locales la estrategia de juego, eso por supuesto si de verdad quieren quedarse con el tercer lugar del mundial, Brasil depende de sus jugadores y su técnico, no de los de Alemania. La disidencia cubana depende, para ganar de sus estrategias y disidentes en el difícil entorno en que se mueven, es el que hay, y no del régimen.

Hoy han surgido muchos rebeldes cubanos con un discurso diferente, menos clásico por llamarlo de alguna manera. Muchos miran las nuevas corrientes de esos jóvenes cubanos que se enfrentan al régimen con temor, con recelo, con desconfianza, los llegan a tildar de castristas y de enemigos de la libertad. Hace diez años muy pocos luchadores por la democracia en Cuba cuestionaban estrategias que por años han existido, el embargo económico norteamericano, las restricciones de viajes, eso desde lo externo, en lo interno, casi todos eran verticales, para ellos derechos humanos primeros, en el medio, y después, por supuesto en aras del bienestar del pueblo, pero se saltaban la cotidianidad del plebeyo, de ese que es el potencial recluta que engrosará eventualmente sus filas, de ese a quien hay que llegar. Ahora es escuchan voces frescas, catalogadas, erróneamente en mi opinión,  de light o menos duras y hasta de indignas y entreguistas. Yo creo de otra forma, en mi opinión, esas voces están surgiendo como parte de la evolución natural de la disidencia, como parte de un proceso de aprendizaje, erróneo o no, basado en las experiencias, y sobre todo, resultados, hasta hoy obtenidos por la sociedad civil independiente en Cuba.

¿Alguien podrá imaginarse a los directores técnicos de Argentina y Holanda viendo los videos del partido Brasil-Alemania, rival de la final de uno de esos dos equipos, con el objetivo de imitar a Brasil en su juego? ¿Verdad que no? De Brasil verán en los videos lo que no debe hacerse contra Alemania, y seria hasta molesto que luego de perder 7-1 Scolari intentase darle clases y catalogar de equivocados por malas estrategias a sus homólogos aún vivos en este torneo. Que nadie se ponga bravo pero es, cuando menos incomodo, que alguien de la vieja guardia diga hoy que los “pinos nuevos” no tiene la razón y ellos sí, porque en realidad no tienen, mas allá de buenos deseos y compromiso, nada que mostrar, ni un gol a favor. Creo que las voces disidentes “suigeneris”  que hoy florecen en Cuba están sencillamente aprendiendo, incluso aunque estén equivocados, porque hasta hoy, los viejos soldados de la libertad de Cuba solo tienen goleadas en contra en su historia. Al final, como en el Mundial, son los resultados los que tienen la última palabra.

martes, 8 de julio de 2014

La propaganda.

Bodega en Cuba.

Recuerdo aquellos días que, en condiciones atmosféricas específicas, se colaban los canales americanos en nuestros televisores. Hablo principalmente de la segunda mitad de los ochentas. Mi casa fue una de las primeras en tener tele a color en mi calle, comprada en la casa del oro, y yo llamaba a los chamaquitos del barrio. Como todo era en inglés, rara vez se colaba Univisión o Telemundo, no entendíamos ni J de lo que se decía, pero los comerciales, ah, eran lo que más nos gustaba. Y es que tenían gracia, de cualquier cosa te hacían la boca agua, lo mismo un refresco cayendo en cámara lenta en el vaso con gotitas de condensación, un chorro de chocolate derretido ondulándose sobre un pastel,  o una hamburguesa con carne jugosa, mmm el amarillo del queso,  lo fresco de la lechuga y el tomate. En fin, todos hacíamos silencio y boquiabiertos, babeados, presenciábamos aquello. En Aquel entonces la mayoría de mis socitos creía en la revolución, pero es que ante la belleza de los colores y ante lo bueno todo el mundo sucumbe. Corrían los años en que los cubanos estábamos totalmente aislados, rodeados de un mundo monocromático carente hasta de pintorescas etiquetas. La pasta dental era un tubo de aluminio sin una sola letra, el desodorante más codiciado por aquel entonces, el “de tubo” era un tarugo envuelto en un fino plástico y ya. Los cubanos vivíamos sin contacto alguno con el mundo, con la sociedad de consumo. No había casi turistas extranjeros, era el entorno perfecto del totalitarismo. La propaganda oficial hacia énfasis en lo malo de un mundo exterior que no conocíamos del todo en realidad, y nuestro único contacto eran los bolos y las películas del sábado, yumas, y quedábamos maravillados de los carros que ahí salían, que comparados con los aburridos ladas eran cohetes. Pero la gente en general tenía una imagen del capitalismo que coincidía casi 100% con la que nos dejaban ver los medios en Cuba.

Todo aquello fue palideciendo en los años 90. Con la caída del suero soviético, Cuba comenzó a verse invadida de turistas en short y sandalias, rosaditos y espigados. Empezaron a rodar por las calles otros autos, Nissan Sentra, Toyotas, rentados por los rubios. Los viajes a Cuba aumentaron, la gente regresaba ya con más frecuencia. A donde quiera que llegaban invadían el ambiente con el fuerte  aroma a Paco Rabanne, el chicle, y sobre todo, la obesidad que contrastaba con lo famélico de nuestras humanidades. Ya no necesitábamos de unos días de atmosfera cómplice que nos abriese la ventana. Las tiendas de dollares se fueron expandiendo, la pacotilla, las etiquetas pintorescas llegaron al fin a nuestras vidas, sino a disfrutar de los productos que contenían, por lo menos deleitaban nuestras vistas, avivaban nuestras ambiciones, nos ponían a soñar. Y es que, como humanos al fin, a todo el mundo le gustan los colorcitos y, repito, lo bueno. El castrismo había perdido aquella rama de su propaganda que se empeñaba a mostrarnos un mundo cruel afuera, ya estábamos viendo adentro chispazos de la realidad externa. A los que el hambre de los 90 no les basto para convencerse de la porquería de aquel sistema que vivíamos y que se sentían aun protegidos de un mundo cruel que convulsionaba allende los mares, terminaron por chocar de frente con la pacotilla.

Y entonces, si casi todo el mundo ya sabe que en el capituti está la pasta, el bienestar, el progreso ¿Qué es lo que queda de la propaganda castrista? Confieso que me vengo dando cuenta recientemente de esto, y que una vez creí importante que mostrar el capitalismo exterior malo era lo fundamental, pero creo que me equivoqué. Lo fundamental, y siempre lo  ha sido, es mostrar a un gobierno intocable, impenetrable, omnipresente, omnipotente, a prueba de fuego, balas, huracanes y terremotos. En realidad eso es lo que frena a los cubanos hoy, cubanos que saben que el capitalismo es mejor, que los de la tribuna en la plaza son una bola de mentirosos y descarados, pero siguen pensando que detrás de cada jugada esta la mano negra que todo, absolutamente todo lo controla, y nada se le escapa. La propaganda no solo consiste en decir y crear organizaciones de masas que todos saben no funcionan, basta con que existan y ya eso por si genera temor y sensación de estar vigilados, consiste también en no decir, en no mostrar una sola contradicción en las alturas, en sacar a la luz algún que otro acto corrupto una vez resuelto, nunca antes, ni en fase de investigación siquiera. Todo bajo control, están en todas partes, nada se mueve sin su consentimiento. Esa es la parte fundamental y más paralizadora de gusanos de la propaganda del régimen y sigue funcionando a toda mecha.

Llega a ser tal el efecto, que pocos, muy pocos, son los que logran desligarse de este estigma provocado por el adoctrinamiento de tantos años, incluso fuera de Cuba. No es raro leer expresiones de desconfianza en cualquier cosa, aun así sea una buena noticia, y yo tampoco escapo, ahora mismo estuve tentado a escribir buena noticia entre comillas. A veces leo cosas tan descabelladas que me cuesta, otra vez yo víctima de la doctrina, creer que no sean del G2 quienes las dicen, que no haya entre esos grupos de pesimistas al menos un agente echándole leña al fuego. He llegado a tal punto de adoctrinamiento, aun así me resista a voluntad, que comienzo a pensar que la gran mayoría de los cubanos que escriben en la Web de esa forma que no deja espacio a un logro real de la oposición o a una deriva natural del empobrecimiento del marco socio-politico actual en Cuba, son agentes del gobierno cubano. Sé que exagero, es demasiado que sean tantos, sé que estoy siendo víctima del régimen cuando digo esto, pero, también sé que el régimen sabe que mientras lo crean impenetrable menos darán el salto a la rebeldía publica, y el régimen no escatima recursos en mostrarse un ente por sobre todas las cosas, por sobre todos nosotros. Que Dios me perdone.

lunes, 7 de julio de 2014

Inflación

Me siento tonto escribiendo la oración que sigue. Desde el primero de enero de 1959, todos los movimientos, estrategias, planes y acciones de  los tiranos que rigen los destinos de los cubanos tienen un solo fin, mantener el poder. Que a nadie le quepa dudas que son capaces de cualquier cosa, por muy sanguinaria que sea para no ceder un ápice de  control, y de su seguridad,  de la isla. Los motivos que tienen la verdad no importan. Yo creo que cuando Fidel Castro estaba activo, al menos oficialmente, lo movía un desorden severo y patológico de narcisismo, y a Raul lo mueve hoy el terror de saber que, de ceder un milímetro corre el riesgo de convertirse en un Videla o un Pinochet, este último hasta abrió el banderín y tuvo que sudar al sentarse en un banquillo de acusados, Raul sabe que el oficio de tirano es vitalicio y que el poder absoluto es la única manera de escapar de la justicia, él sabe que han matado, que han robado, que han explotado, que han cometido genocidio, si, genocidio, en fin, que no va a escapar si permite libertad en Cuba.

Hechos que demuestran el proceder maquiavélico de los dictadores isleños sobran, y no tienen techo en la magnitud de su crimen. Fidel Castro y su revolución llevaron al mundo al filo del apocalipsis nuclear en Octubre de 1962, nunca el planeta estuvo tan cerca de millones de muertos por una guerra atómica, y los mayimbes cubanos querían apretar el botón así desapareciera no solo parte de USA, sino Cuba entera, por aquellos tiempos estaban en franca competencia con el poderío yuma, la guerra fría, el método que utilizo Castro I para lograr ser eterno en el poder. Cuando ven que se puede poner en peligro la estabilidad interna de la isla no lo piensan dos veces para matar civiles. En los primeros años de la tiranía, cuando esta enfrentaba una resistencia real y fuerte, el paredón no dejaba de fabricar cadáveres desfigurados en los tenebrosos fosos de La Cabaña, murieron ahí desde estudiantes universitarios hasta luchadores armados del Escambray. Recientemente vimos como hundieron un remolcador con niños abordo, temían un éxodo descontrolado a punta de robo de barcos que podria desestabilizar la situación interna, también fusilaron a tres muchachos (en el 2003) por intentar, sin matar a nadie, robarse otra lancha, tenían que poner el escarmiento alto, no era momento de correr riesgo de otro éxodo. En momentos en que Clinton flexibilizaba relaciones, mataron a 4 civiles de Hermanos al  Rescate  en aguas internacionales, las relaciones tensas con USA le garantizan poder a los Castro y estabilidad en su patio, y estos pasos de Clinton no les convenían. Cuando la Unión Europea intentaba mejorar relaciones con Cuba, se aparecieron con 75 condenas infladísimas a personas en su mayoría desconocidas hasta aquel entonces que en realidad no suponían peligro real, el peligro estaba en la UE y sus pasos hacia “la mano blanda”. En fin, no hay dudas de que no les pesa la mano para matar, hundir, tumbar o fusilar si huelen peligro a su balanza.


Hoy leo a algunos periodistas independientes hablar de que quizás en Cuba estén preparándose para una nueva tanda de fusilamientos y crímenes burdos como esos. Si bien estoy seguro de que el régimen cubano es capaz de eso, no creo que estén transitando hoy un momento de peligro como los transitados antes como para necesitar llegar ahí. No se puede inflar la maldad del castrismo, creo yo, y alegar que matan por placer, son asesinos y matan, si, matan, pero por necesidad, y hoy por hoy no me parece que estén necesitando sangre, al menos explícita, la implícita no ha parado de derramarse en este medio siglo,  pues el patio está tranquilo.

viernes, 4 de julio de 2014

El efecto escafandra.

El vacío lo rodea oscuro y silencioso. A lo lejos, un punto brillante baña con luz blanca su traje mientras a sus pies se tiende en toda su inmensidad el azul inconfundible del planeta de donde hace unos días despegó al espacio. Ahí está, flotando en la nada como pocos han tenido el privilegio de hacer en toda la existencia humana y de pronto suena un ruido… Bop… Aquí Houston, Gómez escuchamos un sonido extraño ¿está todo bien por ahí? –Todo bien Houston. Luego de unos segundos de silencio: - Gómez, los monitores están detectando una aceleración de tu frecuencia cardiaca y disminución del ritmo respiratorio, confírmanos tu estado.-Todo bien Houston, repito, todo bien, pero necesito abortar la caminata.-Aprobado Gómez, aborta y anótalo en la bitácora, regresa a Eagle 1.-Eagle 1, abran las compuertas que voy entrando. Pone los pies en el transbordador, se cierra la puerta detrás de él, con movimientos que denotan desespero intenta quitarse el casco, se le traba el cierre de seguridad, forcejea un poco hasta que lo logra y luego de un tirón se arranca de a viaje la escafandra exclamando Ahhhhhggggg, para luego respirar profundo, muy profundo. ¿Qué te paso Cheo? –Que se me fue un peo allá afuera coño.-Hahaha (risa en inglés) pero debió ser tremendo el peo ese. -No hombre si no fue nada del otro mundo, fue un  peito-burbuja (según la escala de Atanasio), de los que solo hacen “Bop” sin R ni nada, yo me tiro de esos un montón en la casa, hasta acostado con la jeva viendo una película y nadie se entera, pero encerrado en la escafandra eso es lo más grande de la vida chico.-Si hasta se te aceleró el pulso, Houston nos avisó que preparásemos los primeros auxilios para cuando entraras.

Las reformas económicas de Raul Castro son eso precisamente, un peo en el espacio, pero al fin y al cabo, un peo, carente de energía, carente de importancia, vamos, un peo y punto. Lo que pasa es que se lo están tirando dentro de una escafandra, en medio de aquel absurdo, pero absurdo de verdad, que lleva imperando por medio siglo, en medio de la nada absoluta y del encierro total. En honor a la verdad los cambios de Raul Castro, o el que sea que los orqueste no son nada, ni serios parecen. ¿Si se tiene dinero se pueden hospedar en un hotel o comprar un celular? No jodas chico. ¿Qué ahora puedes ponerte un timbiriche de frita sin esconderte, o un restaurant de 8 mesas? No fastidies coño. ¿Qué ahora no te ponen tantas trabas para salir al extranjero? No me vengas con eso a estas alturas carajo. Que si la zona franca del Mariel, que si escavan para encontrar petróleo, que Putin va a Cuba, que los chinos y su modelo, no me jeringues caballo, que tiempo ha sobrado para eso y nada de nada, baba y más baba. Y de políticas ni hablar, esas no califican ni para peito-burbuja, la única es la del techo de 10 años, y el presidente con 80, válgame Dios. Que son algo más permisivos con la disidencia, no me mientan coño, siempre han sido selectivos y aleatorios para la represión, y nunca se ha sabido a quien le caerán y a quien no, si ese ha sido siempre el truquito para engañar a los tontitos que ven a Pánfilo en la calle y dicen: "ven, mira lo que habla ese tipo y no esta preso". En fin, que en Cuba la gente sigue pasando los mismos trabajos, el totalitarismo sigue campeando por su respeto, no hay cambio nada, no está pasando nada.  Cuando quieren golpean, cuando quieren suben precios, cuando quieren desaparecen, silencian, es lo mismo de siempre.


Y entonces ¿Por qué tanto lio con estas reformas raulistas? Adentro de Cuba desde luego habrá quienes le tengan fe a estas flatulencias del general, casi todos esos pobres creyentes son castristas por supuesto, otros, no tan castristas han estado en el silencio toda la vida, cualquier “Bop” es un repique de tambor africano de esos que suenan un montón, en aquel silencio constante no digo yo, aunque yo no me he encontrado con nadie de Cuba, gusano, que me diga que aquello esta mejorando, mas bien me dicen que la cosa es la misma porqueria, como es lógico y como yo ya sé, y mucho menos que va a mejorar, la gente sigue huyendo en manada, y no bajan los numeros migratorios. Y por acá, pues pasa lo mismo, muchos se crea expectativas, para bien o para mal, unos alegres, otros preocupados, con un peo, solo un peo coño. A este fenómeno yo le llamo: El Efecto Escafandra.

miércoles, 2 de julio de 2014

La ley y la moral.

La democracia, y me importan un rábano los conceptos enciclopédicos, este es el mío, es división de poder, libertad de expresión, asociación, reunión, y el imperio de la ley, único imperio que existe bajo esta estructura social, y sufragio universal donde todos pesan lo mismo, un voto. En una democracia sana, las leyes son siempre a conveniencia de la gente, y el principio fundamental de estas es no dañar a otros. En fin, que para ser una buena persona lo único que tienes que hacer es cumplir la ley. Bajo este sistema en plena y saludable función a la moral queda relegada al plano ornamental, usted realmente no la necesita, si cumple la ley es bueno y punto.

Si para tumbar al castrismo necesitamos que la gente fuera de Cuba, residentes en sociedades democráticas conviertan la moral en un pilar fundamental, y también el altruismo y el compromiso ajeno, estamos sencillamente embarcados. En Estados Unidos podrán ser consideradas inmorales por muchos las peticiones de levantamiento del embargo, pero lo cierto es que no son ilegales, allá eso se puede hacer, porque hay libertad de expresión. La gente vela por sus intereses personales, como es lógico, y mientras no lo hagan incumpliendo las leyes, o sea, dañando a otros, pues no hay nada que hacer. Siempre queda el berreo como camino a escoger, desgarre de vestiduras, y puede estar este sustentado en la moral y en los mejores sentimientos, y por supuesto es también legal pero nada puede hacerse, pues el “enemigo” que pide eliminación de restricciones está actuando dentro de la legalidad vigente en un país democrático.

Jodidos estamos si necesitamos que el mundo olvide sus intereses personales y ponga nuestra libertad por encima de ellos. Metamos esa frase en nuestras cabecitas y dejaremos de gastar energías contra inocentes que están en todo su derecho a abogar por lo que les conviene a ellos. Que diga el de google lo que le da la gana, es un hombre de negocios, que querían ¿Caridad? Esa está en las salas de cuidados paliativos en los hospitales ¿Compromiso con nuestra causa? ¿A santo de qué? A los castristas, cuando acusan de recibir dinero de afuera algún disidente siempre les digo que no griten más y que los acusan ante la ley y llevaran su castigo, lo mismo les digo a los anticastristas del exilio que se la pasan gritando contra otros civiles conciudadanos en sus países. Podremos considerar inmoral muchas declaraciones y acciones de otros, pero mientras sean legales todos nuestros gritos serán palabras al viento.

Nota, Actualicé esta entrada corrigiendo algunas cosas y agregandole unas líneas.

lunes, 23 de junio de 2014

Mia Cuba.

Tostones rellenos con picadillo a la habanera, pan cubano, “pisa” cubana,  “sangüichi” cubano, pan con “bisté”. Estos entre tantos otros son ofertas en cualquier supermercado miamense. Iba en el carro con un familiar hace unos cinco años cuando visité aquella bella cuidad y le comentaba lo lindo que se veía todo, cálido, colorido y me respondió: Evelito, así mismo estaría Cuba de no ser por la mierda aquella. Yo confieso que no sé si es verdad que así mismo estaría Cuba, pero de lo que si no tengo dudas es que para muchos cubanos, en efecto, Miami es “su Cuba”. Miami ha terminado por convertirse en ese pedacito de tierra que les arrancamos a los americanos, y a los comunistas, y que demuestra lo que podemos hacer en libertad los cubanos. Miami es para muchos de sus habitantes el último reducto de Cuba libre, la vitrina que muestra a su isla sin fideles y raules. Ahí, en esa tierra arenosa y con canales, colindan la vieja música cubana, y la nueva música norteamericana. Ahí se celebra “zanksgivin” pavo, “congrí”, yuca con mojo y aguacate, y hasta puerco asado. Miami es el único lugar del mundo donde cada 20 de mayo hay fiesta, allí el seis de enero sigue siendo el día de reyes y es donde único se sabe, hoy por hoy, por qué Songo le dio a Borondongo.

Pero, algo está pasando en aquel pedacito de tierra que yace como halada por alguna fuerza mágica y se sale  de la masa continental de Norteamérica apuntando al sur. Muchos de los que hoy se pasean por sus impecables calles y avenidas vivieron en carne propia la tortura y el estigma del castrismo, fueron, no pocos, vapuleados por vecinos y amigos de antaño, expulsados de la tierra que los vio nacer por un grupo de secuestradores del bien y el mal. Miami es, como ninguna otra cuidad en el mundo, el lugar donde se concentra el mayor número víctimas directas del comunismo latinoamericano. Sin embargo, esa gente ve hoy como el patio se les llena de comunistas, algo impensable hace unos 10 años. Gente como Pablo Milanés, entre otros abanderados históricos de la tiranía, dan conciertos en la mismísima calle 8 y hasta se dan su saltito a la Ermita de la Caridad donde tanta misa se ha dado por las victimas del sistema al que el morenito del “espendrú” por tantos años alabó. Es del carajo caballeros, porque no es fácil, después de que lograste escapar, ver a los mismos victimarios invadirte otra vez. Razones no faltan para los gritos, para la incomodidad, para el descontento. Hay que decirlo a calzón quita’o: El castrismo ha separado familias, ha matado gente, y creado mucho dolor en Cuba y ese dolor esta en Miami también y cualquier reacción ante esta invasión se queda corta.

No obstante, yo considero que hay que estar tranquilo. Ya sé, ya sé que muchos consideran a Miami como su Cuba, pero no lo es. Esa cuidad sigue siendo una urbe más de un estado de la unión americana, ahí hay que cumplir la constitución que hicieron los próceres de esa nación y nadie puede brincársela. Si bien es cierto que lo que hoy llega allá no es igual a lo que llego ayer, si bien es cierto que las oficinas de inmigración están llenas de cubanos que no saben que es el tasajo ni el quimbombó, y si es también cierto que ya aquella efervescencia que generaba el saberse ultrajado por un sistema que acabo con el civismo ha menguado luego de tantos años de acostumbrarse a la jaula y el alpiste, también es cierto que allá todo el mundo entra por el aro. No hay que preocuparse, compatriotas miamenses, jode, claro que jode, pero el absurdo no va a ganar, el castrismo no va a penetrar porque el castrismo es incompatible con la constitución yuma, el castrismo es una porquería, y a la mierda ni se le teme ni se le hace caso. A menos, y esto sería lo único que me preocuparía a mí de vivir allá, que a estos nuevos pinos que hoy pululan por allá se les ocurra acordarse de sus costumbres culinarias y que el pan con bistec en el publix más cercano sea sustituido por pan con fricandel, o que los tostones rellenos con picadillo a la habanera cedan ante el plátano burro relleno con picadillo de soya, y eso no va a suceder, porque sencillamente no sabe bien. No hay que desgastarse por nada.

viernes, 20 de junio de 2014

Ganadores

Once soldados en servicio activo y unos diez en la reserva, esa es la nómina del ejército de Costa Rica: su equipo de football. Un grupo de jóvenes armados de un par de tacos  le traen la gloria a 4 millones de personas y, ¿saben qué? con eso nos basta aquí, no hace falta más gloria que esa, la del juego, aquí ya somos libres, ya tenemos esa otra. El país entero en la calle de fiesta y nadie va a hacer política con esta proeza de nuestro escuálido ejército contra los "poderosos" del orbe. El pase a octavos de final en Brasil 2014 no es logro de gobierno alguno, y pobre de aquel que ose acreditárselo,  y mucho menos de revolución o un gran mesías, de hecho, aquí, salvo en la religión y la fe, nadie reconoce mesías, y no se vislumbran ni a lo lejos, al menos por ahora y por suerte.

Hoy me fundí en un abrazo con mis socios de la pincha, brinqué, grité y celebré como jamás he celebrado en mi terruño suceso alguno. Montones de problemas sin resolver aun, pero todos son nuestros, y de nadie más, y todos somos de acá,  todo está en nuestras manos y de esto se trata la verdadera libertad, la verdadera armonía, y hasta la misma vida. Es una dicha que seamos en Costa Rica socialmente sanos, al menos lo suficiente para tocar el cielo con algo tan simple como un deporte, es una dicha que aquí no se vele por la democracia en el mundo, y que hasta a veces se mantengan al margen y no pasen de la más vulgar, suave y hasta cómplice diplomacia. Y está bien, no me enojo,  porque ya los ticos son libres hace más de sesenta años y yo, como cubano, no moveré un dedo presionando a los gobernantes de este país para que resuelvan el problema de mi casa natal, ni para que sean más enérgicos a expensas de buscarse rollos por mí, sería una falta de respeto a la felicidad que aquí se ha logrado en estas seis décadas,  seria hasta irrespetuoso con quienes me rodean, aquí estamos por resolver lo de aquí, y en paz, no lo de allá o acullá, y lo de Cuba es cosa mía.

Escribo en este blog, y lo hago porque pienso que así puedo cooperar en algo con la causa de la democracia en Cuba, y confieso que esto es lo máximo que haré por lo que deje detrás y que no olvido. Pero vivo aquí, en un país que es libre hace mucho tiempo, al que no contagiare con mi dolor, este es problema mío únicamente. Mis hijas que celebren muchas victorias de Costa Rica, pero no quiero que lloren, ni que griten, por la tierra que vio nacer a su padre. Y no me va mal después de todo denunciando y usando la web y la tecnología como herramienta, siete entradas contando esta tiene solamente este sitio, y ya he sido leído desde Cuba y hasta recomendado con un link en el blog Sin Evasión, escrito por la luchadora Miriam Celaya quien se la está jugando todos los días. Mi agradecimiento Miriam, me place ser leído y tomado en cuenta por gente que está en la pata de los caballos fajada contra el régimen, y me da impulso para seguir blogueando. Gracias porque desde esta humilde cuartilla me has recordado que no estoy perdiendo el tiempo, y que también soy un ganador. Que viva Cuba libre, y que viva Costa Rica.

miércoles, 11 de junio de 2014

Espacios.

En Junio de 1989 el mundo vio una masacre. Ocurrió en China, en la plaza Tiananmen. Los manifestantes, unos,  los estudiantes e intelectuales, demandaban democracia y más libertades cívicas, otros, sectores de obreros industriales, protestaban por el rumbo que tomaban las reformas de una década atrás, creando inflación, desempleo y amenazando su forma de vida, pues estas reformas, según ellos, habían llegado demasiado lejos y se habían acercado mucho al capitalismo. A pesar de que los hechos más conocidos se dieron en esa enorme plaza en Pekín,  en otras áreas urbanas del país también se dieron paradas importantes. Entre los estudiantes e intelectuales que participaron en aquellas marchas muchos no tenían idea de que se trataba la democracia que pedían, pero sabían de los cambios liberales hechos por Gorvachov en la antigua URSS, y además, les estaba picando el bicho del descontento. La muerte del “reformista”  Hu Yaobang fue el detonante de las protestas. Yaobang; ex alto cuadro del gobierno, casi el uno, quien había sido obligado a renunciar a su puesto de secretario general del Partido Comunista dos años antes, supuestamente por no haber podido controlar unas manifestaciones en 1987; fue impulsor aun en funciones de reformas políticas en aras del respeto a la libertad de expresión y de prensa, y además abogaba por la rehabilitación de las víctimas de la revolución cultural, había ganado muchos seguidores.



Las calles se llenaron en Pekín, jóvenes y no tan jóvenes pedían democracia y respuestas de un gobierno al que consideraban lento, corrupto y violador de sus derechos y llegaron a concentrarse en Tiananmen 250000 personas. Los muchachos construyeron una estatua en 4 días que bautizaron como “La Diosa de la Democracia” mirando directo a la enorme foto de Mao Tse-Tung que “adorna” el sitio. Las protestas se extendieron alrededor de un mes y medio, y obligaron al gobierno chino a utilizar la fuerza bruta, y cruel, acabando con la vida de miles de civiles, según los números reportados por occidente. Fue tal la masacre que se dice que en algunos sitios se encontraron casquillos de municiones de 14.5 milímetros, que son las utilizadas por baterías antiaéreas. Al final quedó la imagen para la historia del joven que detuvo a una caravana de tanques, de quien no se tienen datos pero fue seleccionado por la revista Times como una de las 100 personas más influyentes del siglo XX.


Para muchos lo importante de estos hechos está en la demostración de deshumanización y crueldad de las dictaduras populistas o comunistas, y de su grado de atadura al poder. Para mí en cambio los hechos lo que revelan es que en ciertas condiciones los pueblos, aun frente a una dictadura totalitaria similar a la cubana, pueden llegar a poner en jaque, a punto de obligarlos a la masacre publica, a un gobierno hasta entonces en control de todo o casi todo. Rescato de esta triste historia que cuando los gobiernos comunistas crean, por lo que sea, espacios aun estando controlados, se exponen a que exploten chispas por cualquier razón. No importa si al final gano el poder en China, en realidad cualquier cosa pudo haber pasado en aquellos días, lo que importa es que el pueblo reacciono, presiono, y los obligó a matar a mansalva. De cualquier lugar, de cualquier acción o medida pueden llegarles a los tiranos los tiros. Pueden venir incluso de gente que pide más “socialismo”, de gente que pide más oportunidades ahora que le enseñan el árbol pero les esconden el hacha, y por supuesto de gente que pide democracia y libertad o, sencillamente, que se vayan los mayimbes a la mierda. Por eso yo veo espacios donde otros ven cerraduras, por eso yo veo oportunidades donde otros ven la bota. Nunca se sabe en qué pararán las cosas, nunca se sabe quien ganara, pero con tal de salir de este largo infierno de pasividad hay que ver cualquier brecha como aprovechable, hay que dar un voto de confianza a la gente, al final a nadie le gusta vivir mal toda la vida.

Dios tenga en la gloria a las víctimas de Tiananmen.


viernes, 6 de junio de 2014

Víctimas

El gobierno cubano lleva 55 años, toda su existencia, jugando un roll de victimista. Es víctima del imperio, víctima del gran capital y el capitalismo. Víctima de los medios de comunicación que, según ellos, llevan 55 años por alguna razón diabólica intentando difamar a la gloriosa revolución que lo único que quiere es el bien para todos los cubanos, y que, pobres ellos, no la dejan llevar a cabo. Y a nivel interno incluso también son víctimas, el gobierno es víctima del burocratismo y sus burócratas, de tabúes mal puestos en la gente, de autocensura en la misma gente que termina por impedirles informar, porque al final es la gente la que escribe en los periódicos ¿verdad? En fin que en lugar de revolución deberían autodenominarse como “victimolucion” o algo por el estilo.

Pero esto no fuese tan triste, porque al final que otro remedio no le queda al castrismo que victimizarse ante tanto fracaso en todas las esferas, si ese victimismo no hubiese sido traspasado también a sus pupilos, o sea, a todos los cubanos. Nosotros, lo pintorescos isleños hemos llegado a creernos victimas de todo y de todos, en menor o mayor grado. ¿Qué es mentira lo que digo, que no es tan general? Bueno, quizás no sea tan general, pero sí bastante frecuente. Acaso no leemos que somos víctimas del imperio blando, o sea, de los americanos que no hacen lo que creemos deben hacer, y que tienen planes ocultos. Acaso no nos consideramos victimas del capital también que quiere invertir en Cuba? ¿Acaso no han leído a gente que se siente víctimas de los medios porque a Raul le dicen Raul y no Castro, presidente y no tirano?  Y por supuesto, victimas ilimitadas del castrismo, llegamos a creer que ni un solo hecho en Cuba, sea cual sea, escapa de la voluntad de nuestro omnipotente y presente victimario. En fin, pareciera que perdimos la perspectiva de la realidad, que nos empezamos a creer el agujero, no voy a decir posterior-inferior sino ninguneado, del mundo. Será que no nos damos cuenta que el mundo solo está tratando de avanzar, de vivir, que a los políticos del planeta solo les interesa, no faltaba más, buscar los votos de su gente, y, entre las prioridades de los “tumbuctuneanos” no está la libertad de Cuba.


Y de este victimismo no escapa la disidencia cubana. Hoy mismo vemos como muchos disidentes culpan a otros de sus fracasos, de sus impotencias, se sienten victimas de otros por el mero hecho de que “brillan”, al menos suenan, más que ellos y ya, victimas. Olvidamos lo que se siente al concebir que sencillamente los hay más hábiles, menos hábiles y que este mundo es de los ganadores. Nunca he visto, sí, porque de esto se trataba toda esta labia, a un disidente cubano más vilipendiado desde el anticastrismo que a Yoani Sanchez Cordero. Reflexiono y me pregunto: ¿Sera mera casualidad? ¿Sera que la muchacha es mala de verdad o que aprendimos a ser víctimas y a considerarnos partículas de otros que mueven a sus antojos? En fin, la pregunta de la carreta y los bueyes aquí no cuenta. Yoani es vilipendiada porque primero, fue hábil, y luego, famosa como casi ningún otro disidente o exiliado ha sido y uno al final decide siempre si se convierte en un llorón o no, pero los cubanos aprendimos únicamente a estar a disposición de los designios ajenos, víctimas.

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